Vivencias y pensamientos sobre la ruralidad y la vida en el campo desde Purujosa pueblo casi deshabitado a la sombra del Moncayo.

martes, 5 de agosto de 2014

Crónica Calcenada 2014.

El viernes apedreó en Zaragoza.  La inmensa supercelula causante de las tormentas que recorrieron el valle del Ebro se veía así de espectacular desde el avituallamiento de las parideras del Prado de Purujosa.


La tarde era soledad y agradable cuando los jinetes, andarines y corredores (ya entrada la noche) iniciaron la subida camino de Borobia. Sin embargo, en unas horas, los truenos se apoderaron de la noche. Por fortuna, el diluvio apenas duro 15 minutos pero sin duda, se hicieron eternos para los participantes en la Calcenada.


Mientras, en Purujosa comenzó a las 11 el monólogo de “José el Niño”, organizado por la Comarca del Aranda dentro del programa Noches de Verano. En este mes donde los niños vuelven a jugar por las calles del pueblo y los abuelos recuerdan sus raices, fue una bonita ocasión para que chicos y mayores que estaban por Purujosa se juntaran para reír en comunidad.


A las 7 de la mañana subimos a montar el avituallamiento del Collado del Tablado.  Con sus casi 1.400 metros, el puerto entre Castilla y Aragón nos recibió con frío y niebla. No parecía verano. Tal vez fuera por eso pero en esta ocasión la serpiente multicolor de los ciclistas no fue tan alargada como en otra ocasiones.


Los ciclistas tampoco se entretuvieron mucho en el avituallamiento pues se quedaban fríos. No obstante, algún veterano de las dos ruedas, curtido en muchas cunetas, sabía encontrar el remedio para entrar en calor a base de una bebida isotónica de la tierra.


Mientras los ciclistas iban surgiendo del fondo del valle entre nieblas, el día fue mejorando. De hecho, cuando pasó el coche escoba y almorzamos, pudimos disfrutar hasta del sol, aunque sin quitarnos los polares. Este año subió Kike de Calcena y se sumó Andrés de Tarazona, quien da fe del espectáculo que supone ver el pelotón ciclista de la Calcenada atravesar el Collado del Tablado. Desde aquí agradecemos que nos haya cedido algunas de las fotos que acompañan la crónica.


Después del almuerzo bajamos a Calcena. Según los promedios de otros años, en unas 4 horas y media llegarían los primeros ciclistas a la meta. ¿Conseguiría de nuevo Antonio, el hijo pródigo de Calcena, el Escartín del Isuela, surcar la línea de meta de “su prueba” en primera posición? No solo eso, sino que se repitió la escena del año anterior. Porque aunque Antonio sacó unos metros de distancia para saludar a sus familiares y amigos, esperó para entrar nuevamente de la mano junto a su compañero del 2013. Los dos primeros peldaños del podium repetían nombre.



Luego comenzaron las fiestas de Calcena, con la tradicional sangria en la plaza alta. Pero esa ya, es otra historia.

VII Chupina Rock. Beratón, 9 de agosto.

Nuestro amigo Vicente, de la asociación Cruz de Canto de Beratón nos envía el cartel del Chupina Rock que se celebrará el próximo fin de semana y aprovecha para invitar a todos los purjosanos a subir y hermanar lazos de amistad. 

Recordemos que el año pasado en el VI Chupina Rock se pudo formar un equipo de zagales de Purujosa para competir en el torno de fútbol sala entre pueblos.  

lunes, 28 de julio de 2014

Purujosa en la literatura.

Estos días se inicia el rodaje de la adaptación cinematográfica de la famosa novela de Miguel Mena, Bendita Calamidad, que como muchos ya sabrán tiene por escenario los distintos pueblos que rodean el Moncayo. Otro día referiré al proyecto del director Gaizka Urrestu, ganador de un Goya y de este libro que tan buenos recuerdos me trae. Sin embargo, hoy quisiera citar dos obras mucho más modesta y desconocidas pero que también tiene por marco Purujosa.

La primera de ellas es el libro de Benito Sebastián "Dos para Javier" donde se incluye la obra de teatro que a nosotros nos interesa:  El espíritu del Moncayo. El autor es natural de Bardallur donde tuvo por maestro en los años 50 a D. José María Viu, que previamente había sido maestro en Calcena y se casaría con Doña Valentina, natural de Purujosa. En reconocimiento a ellos dos, el protagonista de su obra, Francho, es un pastor natural de Calcena que entabla amistad en la cima del Moncayo con D. Alfonso, un enigmático personaje que a la postre resultará ser el espíritu del monarca aragonés Alfonso el Batallador. Así mientras el primero le relata su romance con la hija del molinero de Purujosa, el segundo le descubrirá la historia del naciente Reino de Aragón en la alta Edad Media. Así, el relato viaja desde la batalla de Cutanda en el siglo XI al supuesto incedio en Valcongosto que al final resulta ser una falsa alarma, del Romance del mio Cid a jotas populares tales como: Cabecido del Moncayo / Tu sabes cuanto te quiero / pero por querer quiero aun más / a la hija del molinero.

El segundo libro a reseñar es Adiós familia, de Carlos Miranda y Franco de Cortillas, algunos de cuyos antepasados descienden de Purujosa. Se trata de una novela costumbrista ambientada en el siglo XIX moncaino, relato generacional que parte de una humilde familia de Purujosa donde uno de sus miembros emigra a Tarazona en busca de provenir. Así, en el texto se recoge las duras condiciones de vida moncainas, como una nevada en Beratón, las festividades como la romería de la Virgen de Constatín o los vínculos entre pueblos moncainos como el hecho de que uno de los protagonistas festeje con una talamantina y tenga que cruzar las Peñas de Herrera para ver a su amada. De la misma manera y de modo premonitorio, se recoge el drama de la emigración que tanto iba a sufrir Purujosa: "aquí cada vez quedamos menos, unos se mueren y otros se van a la ciudad".

En definitiva, dos obras que se ambientan en Purujosa y el Moncayo, de dos autores vinculados de uno u otro modo con esta tierra y que quisieron entregar al pueblo sendas obras dedicadas con cariño, con el mismo que hemos leído sus palabras.

martes, 22 de julio de 2014

I Taller de fotografía nocturna. 22-24 Agosto (Purujosa)

Desde que recalara en Purujosa, el fotografo Goyo Hueso quedó prendado de sus paisajes. ¿Qué mejor marco para realizar un curso de fotografía?. Gracias a su iniciativa y al apoyo del Ayuntamiento, lo que en principio fue una idea, dio paso a un proyecto que dentro de un mes se hará realidad.

La inscripción cuesta 100€ incluyendo el alojamiento a pensión completa. El curso comenzará el viernes a las 19:00 con una charla sobre aspectos técnicos de la fotografía nocturna (luminosidad, astronomía, etc.) procediéndose por la noche a la primera salida de campo con distintas localizaciones. La jornada del sábado incluirá el procesado de las fotografías en lightroom y photoshop, visita guiada a la localidad y nueva salida nocturna. Concluirá el domingo con una proyección de los trabajos realizados. 

El interés inicial suscitado ya señala el éxito de la propuesta: A falta de 30 días, quedan muy pocas plazas para inscribirse. Pero aun estas a tiempo de retratar la luz de la oscuridad moncaina. 

miércoles, 9 de julio de 2014

Lluvias y riada del Isuela. 3-4 julio 2014

Era verano pero parecía otoño. Una Dana o gota fría en pleno julio. Todo el día lloviendo. Más de 50 litros en 24 horas saturaron la tierra. El resultado, una crecida que alcanzó los 25 metros cúbicos en el aforo de Trasobares.


La misma tarde del día 3, antes de que se alcanzara la punta de la riada, aprovechamos una pausa en el diluvio para acercarnos a los ríos y barrancos. Mientras el Isuela, al estar tan próximo a su manadero, todavía no llevaba una "royada" excesiva, Valcongosto, Matarranas y Peña el Águila llenaban su caudal.
Mientras, en el albergue de Purujosa, la roca natural que cierra el comedor lloraba. Cual manantial, pequeños hilos de agua caían a lo largo de la piedra. La tierra no admitía más agua.
Finalmente, tras la tormenta llegó la calma y con ella las valoraciones de los daños. En nuestro descenso a lo largo del valle del Isuela vimos como el río en su cabecera, a los pies de Purujosa, había incrementado su caudal presentando el característico color "royo" de la riada. La crecida había alcanzado el sistema Karstico que da origen al río en la fuente de Purujosa. Por su parte, en Calcena, el Arco de la Cueva volvía a manar un río de agua.


Así la situación, no nos sorprendió encontrar tramos de la carretera llenos de cantos rodados arrastrados por los caminos e incluso una brigada de mantenimiento reparando las zonas más estropeadas por estas inesperadas riadas.
Si el monte ya presentaba un aspecto primaveral tras los 30 litros caidos 15 días antes, ahora podemos afirmar que la naturaleza llega sobrada de reservas para el previsible estiaje veraniego. 

domingo, 29 de junio de 2014

Fiestas de la Virgen de Constantín 2014

Este año no puede estar en las fiestas de la Virgen de Constantín. Compromisos laborales en Monzón y las oposiciones me impidieron acudir a la cita purjosana. Al menos me quedan las fotografías que tomó mi padre para imaginar lo bien que lo pasaron.
 
 
Mañana volveré a la Cara Oculta del Moncayo a pasar unos días de descanso y el Mayo me recibirá al llegar a la plaza y con una sonrisa recordaré las otras veces que ayudé a pingarlo.

Pensando ya en San Ramón para quitarnos la espinita clavada.