Recogida de firmas contra los molinos eólicos en el Moncayo y artículo de opinión sobre el tema.

El impacto ambiental y paisajístico que supondría la aprobación de los proyectos de molinos eólicos en el entorno del Moncayo sigue generando preocupación entre la población. Así, se ha iniciado una campaña de recogida de firmas que se puede subscribir de manera online entrando en el enlace anterior. 

Con este motivo queremos compartir las palabras de Francisco Pellicer, geógrafo de la Universidad de Zaragoza y especialista en la geomorfología del Moncayo, cima de la que ha escrito varios libros y artículos:

"El Moncayo, uno de los más reconocidos paisajes de Aragón y la península Ibérica, sufre el acoso de los artefactos para producir energía renovable. Las migajas del banquete "verde" pueden satisfacer a algunos agraciados (particulares y ayuntamientos) pero son un auténtico robo. Los recursos sol y viento hasta ahora no tenían precio. Ahora sí. La desproporción entre las ganancias de las empresas energéticas y lo que dejan en el terreno es escandalosa. Se llevarán los recursos energéticos y dejarán a los pocos habitantes, cada vez más viejos, abandonados en la escombrera. Pero el valor de que se pierde es enorme, aunque por ahora no tenga precio. ¿Cuánto vale el silencio (...) el paisaje de calidad que necesitamos para disfrutar y cargar las pilas?

Es función de las administraciones públicas mantener este patrimonio natural fuera del alcance de los depredadores sin escrúpulos. También lo es ofrecer otro espacios idóneos para la obtención de los necesarios recursos energéticos renovables y defender los intereses de los propietarios del suelo afectados. La clave del conflicto actual es la ordenación del territorio que no solo consiste en aplicar normativas restrictivas (espacios naturales protegidos) que no contemplan el nuevo fenómeno de las renovables. Es preciso elaborar una estrategia específica que tenga en cuenta el valor del territorio en sus dimensiones ambientales, sociales, económicas y culturales. Sin estas estrategias estaremos dando palos de ciego, disipando nuestras pocas fuerzas, destrozando nuestros paisajes y entregando nuestros recursos a cambio de cuatro perras y toneladas de chatarra por los montes. La mal llamada España Vaciada dentro de 30 años estarás más vacía, más fecha y más empobrecida, como un gran cementerio de cruces en aspas. "