Acondicimiento de la fuente del Col

Cerré el portalón de casa y partí hacia la montaña buscando la fuente del Col. Sobre la Peña de las Golondrinas, junto a las últimas casas del pueblo, observé un cernícalo que huía ante el acoso de tres aves mucho más pequeñas. Mediante acrobáticas cabriolas y vertiginosos picados, atacaban a la rapaz para defender el territorio y a sus polluelos. Una escena de la naturaleza verdaderamente sobrecogedora sobre los tejados de Purujosa.

El fondo del barranco de la Virgen estaba muy florido. Los escaramujos o rosales silvestres (rosa canina) están en plena floración, lo mismo que los saucos. El blanco de las flores inunda su follaje. Sin embargo, la primavera no solo trae una explosión floral, también conlleva el crecimiento de las zarzas, así que me entretuve un rato arrancando algunas que estaban creciendo en la base del Pilón de la Leche. 

Remonté el barranco de Cuartún siguiendo las marcas blancas y rojas del GR-90 que recientemente repintó nuestro amigo David de Talamantes y una vez superado el collado Prenzal llaneé hasta  la Fuente del Col. Desde el camino pude observar que la brigada había arreglado también la balsa situada debajo del manantial y que las progresivas riadas habían colmatado y destruido. Hay que tener en cuenta la importancia de esta balsa tanto para el ganado como para los animales. 

En cuanto a la fuente, la han construido en el lado derecho del camino, unos metros por debajo del manantial para que diera el nivel. Entre dos esbeltos chopos. Es una buena obra de cantería, con piedras talladas y bien arrejuntadas. Costa de un solo caño que a partir de ahora permitirá saciar la sed del caminante sin necesidad de meterse en la cuneta del camino donde desagua la surgencia original. 

Además, la fuente está bellamente decorada con un escudo heráldico del cuerpo de forestales en donde aparece la inscripción “Fuente del Col” y la fecha de finalización de la obra: 31 de mayo de 2012.