Vivencias y pensamientos sobre la ruralidad y la vida en el campo desde Purujosa pueblo casi deshabitado a la sombra del Moncayo.

domingo, 2 de septiembre de 2012

Rojo atardecer en el puerto de la Crucija

Volvía de trabajar en Oseja. Tras cerrar el museo de la agricultura tradicional, remonté la carretera. Cuando alcancé el alto del Puerto de la Crucija me maravillé ante el espectáculo que se abría ante mi. Detuve el vehículo y cogí corriendo la cámara de fotos para inmortalizar el momento: Un crepúsculo de postal. Tras el perfil de la sierra del Tablado, el sol jugaba con las nubes, convirtiendo los cielos en una hoguera de color. 

Esa noche me había invitado Antonio a su cumpleaños en Calcena (Gracias amigo). Me senté junto a Paulino y me dijo: "Mira que atardecer he fotografiado cuando iba a encerrar las cabras". Sin duda, era un crepúsculo que no dejaba indiferente. 

2 comentarios:

  1. IMPRESIONANTE.
    Es increíble, yo soy una aficionada a hacer fotos a los atardeceres, es una de las cosas más bellas del cielo.

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  2. Pues si Marga, en algunas ocasiones parece que las nubes van a prenderse fuego.
    Un abrazo.

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